Juan Gerardo Guaidó Márquez, mejor conocido como
Juan Guaidó, es un político e ingeniero venezolano. Nació en La Guaira,
Venezuela, el 28 de julio de 1983. Sus padres son Wilmer Guaidó, un piloto de
aviones y Norka Márquez, una maestra. Está actualmente casado con Fabiana
Rosales y tuvo una hija con ella. Él vivió el desastre de Vargas en 1999 y al ver
que el gobierno de Hugo Chávez tuvo una respuesta ineficiente ante tal evento,
decide que para mejorar a su país debe dar su vida al servicio público. Se
gradúo de bachiller en el año 2000 para luego graduarse de ingeniero industrial
en la Universidad Católica Andrés Bello y, por último, estudió administración
pública en la Universidad George Washington y en el Instituto de Estudios
Superiores en Venezuela.
Antes de ser muy conocido por la disputa
de la presidencia entre él y Nicolás Maduro, realizó varias acciones en su
carrera como político. Fue uno de los fundadores del partido Voluntad Popular
junto a Leopoldo López. Cabe destacar, que López y Guaidó eran unidos, más
específicamente, López fue el mentor de Guaidó en su vida como político. También
ayudó a fundar el movimiento estudiantil político. Participó en varias
protestas, como aquella del año 2007 que derivó en el referéndum constitucional
que Chávez perdió. Fue electo como diputado federal en la Asamblea Nacional. Al ser elegido como tal,
fue la competencia del chavismo en Vargas, un estado en el que dicho movimiento
socialista estaba considerablemente arraigado. Eventualmente, se convirtió en
el presidente de la Asamblea Nacional. Dicho título derivó en la ya mencionada
disputa por el poder ejecutivo del país.
Además de todos sus títulos y cargos que
ha tenido en su carrera como político, se puede afirmar que su mayor logro es
lo lejos que ha llegado en la “batalla” entre el régimen actual y la oposición,
ya que ningún otro político ha llegado al nivel que este hombre alcanzó. Ningún
otro político había llegado a disputar el título de la Presidencia y también es
el único que logro unificar tanto a la oposición, ya que generalmente los
líderes anteriores de oposición no ganaron toda la popularidad que ganó Guaidó. Es un orgullo tener a Juan Guaidó en la
historia venezolana, ya que el forma parte de esos líderes valientes que están
dispuestos a mover montañas por su país. Hay que reconocer que no es fácil dar
la cara ante un dictador que es de temer y decir que éste ya no es presidente,
sino que ya terminó su período. Dicha acción es bastante arriesgada,
considerando todas las formas en la que lo pudieron haber reprimido. Es también
un honor que haya sido reconocido como el Presidente de Venezuela por tantos
países a través del mundo. Espero tener más personas y líderes como éstos en el
país.
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